Taxco de Alarcón es una ciudad vibrante, con fachadas color blanco por doquier, donde los talleres de platería son auténticas fábricas de sueños donde se forja arte.
Los artesanos plateros siguen técnicas transmitidas de generación en generación, donde a través de sus manos, la plata bruta se convierte en joyería fina y artículos decorativos, cada uno con una historia única por contar.
El proceso de creación en estos talleres es un arte en sí mismo. Comienza con la fundición de la plata en lingotes, seguida de la laminación y el corte. Los plateros después modelan y ensamblan estas piezas para crear diseños asombrosos que van desde el tradicional estilo barroco taxqueño hasta interpretaciones modernas y audaces. Por ejemplo, en el tradicional concurso de artesanos plateros que participan en la “Feria Nacional de la Plata” en el mes de noviembre que premia a la mejor pieza del certamen.
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La interacción directa con los plateros permite a los visitantes aprender sobre este arte y apreciar la maestría detrás de cada pieza. Es decir, es más que un simple oficio. Es un reflejo de la historia, la cultura y la vida de la ciudad.
Además, a lo largo de varios días, durante la noche se presentan artistas nacionales e internacionales.
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